Bañé tu pene de sangre y me dijiste que no te importaba. Me penetraste tan profundamente que me hiciste sufrir, yo me quejaba por tus embestidas mientras venía con los ojos entrecerrados tu figura. Puedo recordarla y sentir como mi sangre tibia te chorreaba el cuerpo. Era sangre, amor, placer, mi luna cayendo por la mitad de tu noche, ese revoltijo de escenas me hacía dudar de quien eras, eras alguien a quien podía querer? Era eso algo parecido al amor ? Porque yo estaba tan tibia y tú me penetrabas así, sin ninguna barrera mientras me deshacía sobre ti.
Tienes mi sangre marcada en los ojos, puedo mirar a través de ellos y ahí estoy.
Quien te puede quitar todo el rojo que te vertí? Ni con el agua del mar, ni con la nieve de las montañas.
Bañé tu pene con mi sangre tantas noches
Tus blogs son muy interesantes. Me gusta cómo escribas. Lo que pasa por tu mente es muy interesante.
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